Pamploneses pro-carolingios se sublevan contra el gobernador musulmán Mutarrif ibn Musa ibn Qasi (hijo de Musa ibn Fortún y nieto del conde Casio, fundador de la poderosa familia de los Banu Qasi) y lo ejecutan: el conde Velasco, líder de los pro-carolingios, consolida un poder autóctono en Pamplona (798/9-803) (ó 799).