Concilio de Agde (Francia), celebrado en el monasterio de San Tiberio y que es una continuación del del año anterior en Barcelona, aunque el obispo de Girona es ya Bigó (o Wigo o Guigó) (907-36?), nombrado por el propio rey, y con menor influencia del conde de Barcelona, lo que permite dictaminar a favor de la abadesa Emma, a quien se le reconoce la posesión de las iglesias de Angostrina (Alta Cerdanya), Fullà (Conflent), Santa Maria, en Porqueres (Pla de l’Estany) y Sant Esteve, en Vilafranca de Conflent.