Abd al-Rahman III envía en misión diplomática al norte de África a Mundhir ibn Said al-Balluti, de origen beréber, al que antes (939 ó 940) ha nombrado cadí de Mérida (zona de asentamiento de beréberes masmuda): se trata de resolver los conflictos entre dos partidarios de los omeyas, Al-Jayr ibn Muhammad ibn Jazar az-Zanati y Madyan ibn Musa ibn Abi l-Afiya al-Miknasi.